Sala de Prensa
Contáctanos
EN

EN EL PODIO DE SOCHI: LEWIS, VALTTERI Y SEBASTIAN

30 Septiembre 2018  07:54 PM

  • Con el sacrificio de Bottas incluido, porque se hace de lado: Hamilton, el británico, sale de Rusia con ventaja de 50 puntos sobre su más cercano rival: Vettel

No faltará quien encuentre lamentable que desde el murete de Mercedes le hayan pedido a Valtteri Bottas que cediera el paso a Lewis Hamilton, su colega de establo, que venía detrás.

Asimismo, es casi seguro, que muy pocos aficionados cándidos esperaran que fuera a pasar lo contrario: que privara la indulgencia por encima de la conveniencia. No es de la humanidad que esto suceda y menos, en estos tiempos de individualismo procaz.

El deporte de alta competición tiene por objeto la victoria. Y en los equipos, debe de privar la prioridad que ordena que el interés de todos está por encima del de uno.

Esta vez, como era lo más obvio, le ha tocado a Bottas dar el paso de costado. Y a Hamilton, echarse al frente tal cual era su cometido.

No es regalado lo que ha recibido Lewis, de otra forma, tuviera que haberlo tomado por su propia determinación y correr entonces el riesgo de ser acusado de abuso sobre un menor.

El inglés ha trabajado por nota un fin de semana clave.

Para dejar bien clara su fuerza de dominación, dio cuenta de su contrincante en la pista. Después de salir retrazado del cambio de ruedas, tuvo que rebasar a Vettel y lo hizo con la gracia de una bailarina de ballet en pleno escenario.

En la vuelta 25ª fue el momento en que se ordenó el enroque de las Flechas de Plata. La suerte estaba echada. Listo para cruzar su propio Rubicón, se dijo la sobada frase del emperador: alea iacta est

Él, sabe que es mucho lo que se está jugando: el campeonato. Y va paso a paso con toda frialdad. O sea, con gran ardor.

Este domingo, dio un paso gigantesco.

SEGUNDO Y TERCERO

Muy buena la actuación de Valtteri después de haberse adueñado de la pole position ayer y desde luego, notable la perefección de su largada. Lo demás, ha sido hacer de tripas corazón y obedecer lo que a su rol de piloto número dos, le corresponde.

Sebastian Vettel en el último peldaño de la escalerilla intentó hasta donde su Ferrari pudo. Más imposible… Calladito se va a ver lindo ya que más que nadie él, se ha servido del privilegio de que todo el equipo –incluso su coequipero– juegue para la utilidad de que él sea el “número uno”.

Sólo quien no quiera ver no lo verá: Mercedes, domina a Ferrari. Y Hamilton ha resultado ser un corredor más productivo.

La eficiencia por encima de la inocencia.

El cuarto a la llegada ha sido Kimi Raikkonen haciendo un trabajo discreto y viendo con cierta sorna cómo es que se dirime la importancia de los protagonistas. A él, le dicen: te vas a Sauber y a Sauber se va a ir.

Primero comer, y luego ser cristiano.

EL DEL SHOW

Carrera singular y aparte de los otros 19 concurrentes, la de Max Verstappen encima de su Red Bull, hoy que ha cumplido los 21 años. El corredor más valioso del día. Ha sido quinto (bien dicen que no hay quinto malo) y él fue quien obsequió el espectáculo. El que mostró que conducir un coche al límite, es un arte sólo posible para los iniciados.

Puro corazón, dentro de un piloto lleno de talento.

Max partió del penúltimo cajón y a ocho giros de la largada ya estaba colocado como el quinto. Llegó a liderar, cuando los rivales iban al recambio y mientras sus Pirelli –con las cuales dio comienzo– aguantaron el tren demoledor con el que las sanjuaneó.

LOS OTROS

Daniel Ricciardo en el otro búfalo rojo hizo muy bien su labor pero en tesitura diferente: templada. De salir al final, fue capaz de meter por encima la paciencia, para terminar en sexto lugar. Sin extremar los riesgos. Templado, que también quiere decir: ni muy frío, ni muy caliente.

Séptimo en el orden. El de la agradable sorpresa: Charles Leclerc de Mónaco. A pesar de las reticencias de su modesto vehículo Alfa Romeo-Sauber, se les metió hasta la cocina a pilotos con mayor acervo. Puso en orden a los que llaman los de “la segunda división”. Sin soslayar las chuladas de sus lances cuando fue exigido.

Leclerc no tardará en ser un quebradero de cabeza para Vettel, en cuanto llegue a Maranello…

El conductor de la consistencia, Kevin Magnussen, a bordo de otra unidad que no pertenece a la nobleza –esto es, en un Haas con alma de Ferrari– conquistó a puro valor el octavo sitio. De modo de dejar los dos lugares que todavía dan dividendos a los timones de Racing Point-Force India: el noveno fue Esteban Ocon y el décimo, Sergio Pérez (también muy obedientes a las órdenes de equipo).

COROLARIO

Aún si no corriera Hamilton en Japón y en los Estados Unidos seguiría siendo el puntero en la tabla de posiciones ya que la brecha que ahora abrió, suma los fenomenales 50 dígitos que le dan la inmunidad.

En cuanto a carreras ganadas este año, ha llegado a 8, contra cinco de su rival.

Si se evalúa en función de la vueltas que han liderado, el gradiente ahora dice 341 X 313 a favor de el del número 44. La superioridad, es neta.

Es de suponer que el británico hará hasta lo imposible por ganar las carreras que siguen y su equipo ya mostró músculo, que dice que sí que tienen con qué.

Lo expresado hace unas semanas: sí. Es muy posible que en México –el próximo 28 de octubre– Lewis Hamilton se montará la corona de campeón mundial de 2018.

¡Usted lo tendrá que ver!

Como todo ser que se precie de excelencia en su oficio: lo más seguro será que enseguida, la óptica del próximo campeón por cinco veces, cambie.

La búsqueda de Hamilton se va a volver: enfocada a ir por las siete copas que sólo pertenecen a Michael Schumacher.