Verstappen aprovechó la desgracia de Leclerc y Ferrari para llevarse la victoria en el Gran Premio de Mónaco, su primera en este circuito, acompañado en el podio por Sainz y Norris.

Es la primera ocasión en el año en que Hamilton y Mercedes no estuvieron representados en el podio, una situación que le permite a Verstappen tomar el liderato del campeonato de pilotos y a Red Bull el de constructores, gracias a la cuarta posición de ‘Checo’ Pérez y el abandono de Bottas.

El resultado de la carrera comenzó a configurarse desde antes de que los semáforos de inicio se apagaran, cuando Leclerc se vio imposibilitado de arrancar la competencia. Un primer reporte apuntaba a que podía ser un daño en la caja de cambios, consecuencia del impacto del sábado al final de la clasificación, pero después se confirmó que el error estaba en el semieje izquierdo, contrario a la zona del impacto del día previo.

Con el contador de vueltas acercándose a los 30 primeros giros comenzaron las paradas de pits. De forma sorpresiva Hamilton ingresó a los boxes sin que hubiera indicios de que Verstappen, líder de la carrera, estuviera cerca de hacerlo. A Hamilton se le unieron Sainz, Lando Norris, Vettel y Gasly en su visita a los boxes, esto catapultó a Pérez al tercer lugar.

Pero el drama de Mercedes estaba apenas por comenzar. En el giro 31 Bottas fue a los pits para una parada programada que se convirtió en su abandono cuando no fue posible sacar el neumático delantero derecho.

Hamilton entendió que sería imposible ganar posiciones y a 10 giros del final fue a boxes para colocar un set de neumáticos blandos para buscar la vuelta rápida y el punto adicional, una medida para reducir el daño en la tabla del campeonato luego de su séptimo puesto al cruzar la línea de meta. Esta parte sí funcionó y rápido colocó una vuelta en morado para sumar un punto extra.  

Mientras tanto, Vettel cerró el top 5 logrando sus primeros puntos del campeonato y fue nombrado Piloto del Día.